es una joven empresa dedicada a la producción y realización de eventos, creación de espectáculos y acompañamiento de artistas, donde el arte se convierte en un catalizador de cambio social.
Desde nuestro nacimiento, hemos tenido un propósito claro: crear experiencias que no solo entretengan, sino que también generen
reflexión y conciencia.
Con un equipo multidisciplinar y creativo, en
La Mareante fusionamos innovación artística con contenido de alto impacto social, asegurándonos de que cada espectáculo, cada fiesta, cada experiencia deje huella en quienes nos acompañen.
Traemos un nuevo concepto de entretenimiento. Artístico. Tu próxima experiencia inmersiva donde el arte visual y escénico van de la mano. Es enigma, es misterio, es libertad de expresión. Es deseo, pasión y lujuria. Reivindicación. Actitud que sacude, arte que transciende. Un show que no te esperas. La Mareante emociona.
La Mareante nace del salitre, del oleaje y de la marea! Con la fuerza y pureza del mar, La Mareante es la nueva matriarca de las fiestas, trayendo a cada experiencia un poderío arrollador. En cada marea, nuestras raíces vibran con pasión, celebrando la libertad y con una lucha que nos conecta. Somos más que entretenimiento, somos la ola que arrasa con todo.
¿DÓNDE NACE?
¿DÓNDE NACE?
¿CUAL ES NUESTRO FOCO?
Cada una de nuestras producciones nace con el compromiso de llevar a escena historias que aborden problemáticas sociales actuales, reivindicaciones culturales y temáticas que inviten al público a cuestionar, participar, dialogar y actuar. Creemos en el poder del arte como herramienta transformadora, capaz de inspirar y movilizar.
Nos impulsa la idea de que todo lo que hagamos debe ser más que una simple experiencia estética; debe ser una plataforma para visibilizar realidades, construir puentes y generar cambios.
Por eso, trabajamos codo a codo con colectivos, organizaciones y artistas comprometidos con causas que promueven la justicia social,
la igualdad y el respeto por la diversidad.
Nuestra misión es clara: crear para remover conciencias, provocar conversaciones y, sobre todo, que nunca dejen de disfrutar.
¿QUÉ HACEMOS?
